miércoles, 12 de marzo de 2008

Europa: estímulos a la natalidad para rejuvenecer la población


¿Hasta que punto debemos confiar en la inmigración para evitar el envejecimiento demográfico?. Es una solución de "pan para hoy, hambre para mañana", ya que la población joven que llega a Europa nos sustituirá, de acuerdo, pero ¿y sus países de origen?, ¿quién los sacará adelante si los jóvenes huyen en masa?. La solución no me parece buena. En cambio, la respuesta más natural, la de que las europeas afrontemos la responsabilidad de conseguir el relevo generacional, parece que es mucho más dificil ya que se trata de variar el chip, de cambiar mentalidades, de afrontar nuevos estilos de vida en los que se valore más el ser que el tener.

Transcribo un artículo de Aceprensa, comentando las propuestas del parlamento Europeo respecto al envejecimiento demográfico.

El Parlamento Europeo propone adaptar las políticas familiares al envejecimiento demográfico
Firmado por Aceprensa
Fecha: 12 Marzo 2008

El Parlamento Europeo ha aprobado un informe sobre el futuro demográfico de Europa en el que pide a los Estados miembros que adecuen sus políticas sobre la familia al previsible envejecimiento de la población. Si no se hace algo para invertir la tendencia, la media de edad podría pasar de los 39 años en 2004 a 49 en 2050.

Y es que la insuficiente tasa de fecundidad (1,5 hijos por mujer) y el aumento de la esperanza de vida están llevando a notables mutaciones en la estructura de la población. Los cambios en la pirámide de edades se empezarán a notar pronto en la economía, en forma de presiones sobre el gasto público, que aumentará un 10%.

Otra de las consecuencias del envejecimiento poblacional es el aumento de la tasa de dependencia (número de personas mayores de 65 años dividido por el de personas de14-65 años), que pasará del 25% que había en 2004 al 53% en 2050.

Natalidad e inmigración

Al preguntarse por las causas del declive demográfico, la Eurocámara apunta en primer lugar al descenso de la natalidad. Pero sostiene que en esto influyen también los problemas de infertilidad, que afecta a casi el 15% de las parejas. Los diputados rechazaron que los Estados miembros se hagan cargo de los tratamientos por infertilidad, pero acordaron que estuvieran accesibles a los que quisieran recurrir a ellos.

Otra respuesta al problema es la adopción: la Eurocámara propone a los parlamentos nacionales que faciliten los procedimientos de adopción de niños originarios de otros países e instan a los Estados de origen a que no pongan obstáculos a la adopción de niños víctimas de malos tratos y huérfanos.

Para el Parlamento, España es motivo de preocupación por tener una de las tasas más bajas de fecundidad (1,38 en 2006), de modo que el aumento de la población y el empleo solo ha sido posible por la inmigración.

Sin embargo, en el conjunto de los países europeos la inmigración legal no es suficiente para paliar los efectos del progresivo envejecimiento de la población. Por esto el Parlamento recomienda adoptar medidas para aumentar la natalidad de la población residente en la UE. Entre otras cosas, los eurodiputados se han manifestado a favor de la reagrupación familiar de los inmigrantes legales.

Vida laboral y familiar

Otras de las medidas se orientan hacia la conciliación de la vida familiar y laboral, como la propuesta de que los Estados actúen contra los empresarios que discriminen de cualquier modo a las trabajadoras que deseen ser madres. Los diputados también aconsejaron la puesta en marcha de medidas para que las bajas por maternidad o permisos de paternidad dejen de estar penalizadas en el cálculo de las pensiones de jubilación. Incluso plantean la posibilidad de otorgar mejoras en las pensiones de jubilación en función del número de hijos criados.

Los diputados abogan por crear centros infantiles a precios asequibles, en línea con lo decidido en el Consejo Europeo de Barcelona de 2002, que pedía a los Estados miembros que creasen, antes de 2010, centros para, al menos, el 90% de los niños de edades comprendidas entre los 3 años y la edad de inicio de la escolarización obligatoria.

El Parlamento recomienda apoyarse más en los mayores y promover los convenios que permitan la prolongación voluntaria de su vida laboral más allá de los 65 años, así como reducir las prejubilaciones. En el caso particular de España, las cifras de empleo entre las personas mayores son superiores a la media europea y se prevé que sigan aumentando.

Pero aunque la salud de los mayores haya mejorado, el Parlamento también anima a preparar el sistema sanitario para el incremento de demanda de una población que envejece.

2 comentarios:

Marta Salazar dijo...

vamos ya en 1,5?

si el sector activo tuviese más hijos, se produciría una suerte de pirámide tipo reloj de arena,

lo que significa que, sobre este segmento pequeno de la población recaería el peso de la generación pasiva (arriba en el reloj) y de la futura (abajo en el mismo),

este peso sería insoportable y colapsaría la economía,

más aún una economía frágil y con un gran desempleo como la de la Zona Euro en estos momentos (que tiene que sacar adelante, además a los adultos en edad de trabajar, pero que no tienen trabajo).

Aunque tengan pocos hijos, siempre que llegue al 2,1 o un poco más, siempre habrá un peso demasiado grande que sacar adelante, repartido entre muy pocas cabezas (en relación al resto de la población, se entiende).

En suma, cuando se inicia el proceso de la transición demográfica, es imposible volver atrás...

Saludos!

Anónimo dijo...

Los europeos se complican horriblemente la vida... TENGAN HIJOS , PIERDAN EL MIEDO A LO ESPONTANEO DE LA VIDA, Y NO SEAN TAN HEDONISTAS!!!
...que bueno que estoy bien lejos de ahi...